sábado, 27 de junio de 2009

Años de colegio(HHMM de Cartagena)


Ayer, atendiendo a la invitación de Ecano y Cualqui para colaborar en su BLOG NACIONAL rescaté del cajón una semblanza nostálgica de mis primeros años de colegio.
Me parece que esos años te marcan, generalmente de forma positiva, para el devenir de la vida.
Se recuerda aquello que se ha amado, que ya ha pasado de forma inexorable pero que retienes en la memoria.
Mis recuerdos del Colegio Sagrada Familia van parejos a mi conciencia como persona, como ser humano. Lo veía desde mis ventanas cada mañana al despertarme y levantar las persianas de mi casa, un día tras otro, por eso se hacía cercano, amable, querido, parte de mi hogar.
No fue el primer colegio al que acudí, paradójicamente, sino que pasé primero por las Hermanas de S.Vicente Paúl, en el llamado "Patronato", durante dos años, de los seis a los ocho años.Al siguiente curso ya estaba matriculado en Los Maristas, como se conoce al Colegio en toda Cartagena. ¡Que recuerdos, la mayoría estupendos, sobre este Centro y sus profesores!.
Recorrí sus aulas, con sabor a pizarra, plumilla, tintero, bancos de madera, baby y patio de colegio. Un patio moderno, con las rayas marcadas para distintos deportes, esencialmente balonmano, donde los Maristas siempre han sido punteros.
Mis recuerdos más nítidos comienzan en Ingreso, como se llamaba antes al preparatorio de Bachillerato. Allí te enseñaban perfecta caligrafia, ortografía exquisíta, premiando los textos con una calificación doble, por ej: 10+10, que te llenaba de orgullo y te hacía superar.
¡Qué recuerdos del tiempo de recreo!. Comías el bocadillo, traído de casa o comprado a Emilio, que tenía un pequeño chiringuito dentro del mismo recinto y que atendía con celeridad a la multitud de chavales que se agolpaban en su mostrador.
Juegos, conversaciones, repasos incluso de la asignatura más débilmente estudiada o comprendida. Y vuelta a las aulas a toque de pito del hermano Severiano Bayona Gallo, prefecto de Disciplina. Un burgalés que, como sargento de hierro, forjó nuestras conductas hacia la rectitud.Aún me escribo con él, que se conserva perfectamente a sus setenta y pico de años.
Y el Bachillerato, esa inmensa "carrera" de cuatro años que te formaba para ser un hombre.
El hermano Director, Victor Arroyo, al que llamabamos el "Watusi" porque parecía talmente un hombre de esa raza salvo en el color.
Los días de oración en la Congregación Mariana, dirigida por el hermano Pedro Ignacio, un santo varón amable y dulce, que hablaba de la Madre con un amor especial.Ratos y ratos de capilla, de nuestra hermosa capilla, con una obra moderna en yeso representando a la Sagrada Familia y bajo ella el Sagrario, en adoración perpetua, con su roja luz brillante.
Allí nos refugíabamos pidiendo por un buen resultado en los exámenes o por cualquier otra cosa, siempre hacia Dios infantilmente, madurando en la fe.
El hermano Emilio Rebollo, un buen fraile, noble y algo loco, Dios me perdone, que tenía sus manias porque parece ser sufrió persecución en la guerra, pero docente y bueno.
El hermano Apolinar y las clases de Francés, asignatura que me deleitaba porque lo hablaba yo con mi madre en casa, ya que ella había sido emigrante en el país vecino...
Y en tercero de Bachillerato, el gran profesor:El hermano Vicente Campos Bernad, un caballero, un docente, un psicólogo que nos forjaba para el futuro con absoluta generosidad.
Es difícil compendiar en unos pocos folios tantas emociones, sensaciones o reflejar incluso lo vivido con los compañeros, lo soñado, pero mi idea es hablar de los hermanos, de ellos, recordando también a los profesores seglares que, con dedicación,nos formaban.
Don Victor, don Julián Galindo, don Ángel, don Francisco... Gracias.
En cuarto, ya mayorcitos, la rebeldía del adolescente frente a la institución. El no querer llevar el baby a rayas azules y blancas con la M inmensa en el pecho...
Y el hermano Emilio..."el poteras", apodado así por su naríz y porque nos daba latín con su soniquete en el verbo possum.Cuantos hermosos recuerdos de mi juventud que guardo como un tesoro agradecido a aquellos hermanos Maristas de Cartagena.¡Gracias por todos, hermanos!.

6 comentarios:

Delfin Córcoles dijo...

Siempre tienden a quedar los buenos recuerdos. La señal de que la época fue buena es cuando hay muchos, como es el caso.

Enhorabuena por tantos recuerdos.

Buen domingo.

Unknown dijo...

el sabado 27 de junio escribiste una preciosa carta recordando los tan felices que pasaste en el colegio marista de cartagena
y en ella me nombrabas como prefecto de disciplina y que era un sargento de hierro y que gracias a ello saliste bien educado.
tiene 54 años,eres ats vives y trabajas en zaragoza pero quien eres cual es tu nombre y apellidos
me dicesque aun sueguimos escribiendonos y en este momento
no caigo en la cuenta de quien eres
me gustaria tener contestacion tuya
soy superior de la comunidad de guardamar antiguo seminario marista
tengo 76 años y estoy muy bien en todos los sentidos, cosa que deso para ti tu seres queridos.
espero me contestes lo ante posible.
SEVERIANO BAYONA GALLO

Unknown dijo...

querido amigo:despues de haber reflexionado sobre tu escrito he caido en la cuenta de eres mi exalumno y amigo juan antonio
y te dire que me he alegrado muchisimo.
recibe tu y tus seres queridos un cariñoso y fuerte abrazo
muy atentamente
Hno SEVERIANO BAYONA GALLO

Roberto dijo...

Yo también fuí alumno de los HH. Maristas, concretamente en Algemesí, provincia Valencia. Pasé allí toda mi etapa de EGB, según el antiguo sistema de enseñanza. QUe tiempos aquellos en los que, por citar al que más nos marcó a todos los compañeros de mi generación, el H. Severiano Bayona nos citaba para asistir los sábados por la mañana a realizar las tareas que no se habían cumplido entre semana, o sea, "castigos". Pero eso se agradece, y como educador en mi etapa actual ya que soy profesor de Física y QUímica, más de alguna técnica motivadora de las que se utilizaban antes, harían un enorme favor a muchos de los niños de la actual sociedad. Pero bueno, voy a escribir una carta a este maravilloso tutor, y personas como esta son las que te marcan la vida y forjan tu personalidad. Saludos y felices fiestas a todos los que leais este blog.

Unknown dijo...

El cantinero era"El Sebas".

Unknown dijo...

http://www.milanuncios.com/libros/vendo-libro-dedicado-padilla-de-abajo-76982420.htm