¡Venga ya!...

Ya estamos a martes.El efecto del champán, de la cerveza o del agua del Carmen ya ha tenido que dejar de empapar el tejido y ahora toca pisar tierra,eh.
Aceptamos que todos han ganado,nadie ha perdido y que la derrota ha sido dulce, y no digamos la victoria, que es almibar puro.
Ahora toca ser realistas y darse cuenta del paro, de las cajas de ahorro que se hunden, de la industria, de la ETA, de tantas cosas pendientes que urge solucionarlas.
No mejoraremos como nación, si es que nos importa la tal nación, hasta que,como indiucaba anoche Sir Lancelot, dejemos de votar a "estos o a los otros" porque son los nuestros sin una pizca siquiera de capacidad crítica.
No es renunciar a nuestros presupuestos, sino ser capaces siempre de intentar ver el bien superior, el bien común.
Nuestra labor debe ser concienciadora de esto mismo.
Chesterton,el buen escritor británico ya decía:
"Para entrar en la iglesia nos piden que nos quitemos el sombrero,no hace falta quitarse la cabeza"...

Un abrazo.