sábado, 30 de mayo de 2009

Aceptar la realidad...


Anoche me decía Cualqui que se iba a dar una vuelta por el campo, en plan paseo de la reina madre...
Me gustó la expresión. Luego le contaba yo mis ganas, que no deseos, de ir a Canfranc a pasar el verano allí, a la fresca y que, al llevar mi brazo en cabestrillo, pues habría que subir y bajar en autobús o tren, tan ricamente...
Luego publicó Mamita una estupenda foto de su renovada galería, que parece sumamente acogedora...
¿Qué nos unía y reunía junto a otros muchos?. Creo que el confornarse con poco, o al menos, hacerlo con lo que se tiene o se puede conseguir con el esfuerzo propio.
Vivir en este mundo donde millones de personas no tienen una sonrisa que llevarse a la boca nos pone frente a una realidad cruda:
asumir lo que se es y se tiene es la mejor manera de intentar ser medianamente felices o al menos asumir en cada instante lo que nos sale al encuentro en la vida.
Gozar de esa galería, de ese campo, de mi pequeño retiro pirenaico, del trabajo, de la afición más normal que tengamos nos pone en camino hacia una paz interior muy agradable.
Muchas veces, y sin entrar en demagogias, "el que no se conforma es porque no quiere".
Un abrazo y buen Domingo de Pentecostés.

1 comentario:

Jesús García dijo...

Que pases un buen Domingo de Pentecostés, Caminant.
Efectivamente, una manera de alcanzar la felicidad es conformarse con lo que se tiene, eso sí, sin renunciar jamás a, con esfuerzo y trabajo, llegar a mejorar. Pero teniendo siempre en cuenta que "desfavorecidos" lo somos casi todos comparados, por ejemplo, con el señor Botín y compañía, lo cual no debe conducir a al envidia.
Un saludo.