jueves, 21 de mayo de 2009

El que asó la manteca...


Una de las expresiones es “como el que asó la manteca”. Se trata de una comparación referida al máximo absurdo que podía hacer un ser humano en tiempos pretéritos. Asar la “manteca” (simple grasa animal) era una estupidez puesto que todo el mundo sabía (menos “el que la asó”, claro) que esa grasa solidificada a temperatura ambiente al entrar en contacto con el calor se derrite y desaparece.
Lobogrino, blogger.
Ante toda la que nos está cayendo, el sr. Rodríguez, agotadito por las dos o tres últimas ideas felices vertidas al mundo se propone seguir dando más de lo mismo.
Ahora les dice a los empresarios que se reunan con los sindicaleros "peronistas" pero sin llevar propuestas, que ya las harán los mendez y tojos de turno.
Es como ir a un supermercado, no llevar dinero y,después de llenar el carro, obligar al dueño a que te lo meta en el coche.
Creo que hemos de ir a votar para evitar en parte esto.
Sé que algunos buenos compañeros de aquí discreparán, pero en esta ocasión me parece importante demostrar que no somos siervos fieles del socialismo.
Que ase la manteca él y sus fieles, pero que no cuente con nosotros.
Un abrazo.

3 comentarios:

Delfin Córcoles dijo...

Si pensamos que todas las burradas que está cometiendo la izquierda son por torpeza, equivocación o para distraer la atención nos equivocaremos.

El 14-M la izquierda nos embarcó en un viaje a Venezuela con escala en Argentina del que nos va a resultar imposible volver algún día.

Llevamos 5 años asombrándonos de las tropelías izquierdistas, calificándolas de errores o meteduras de pata. Nada de eso. Está todo perfectamente planificado, no hay ni un detalle que se escape a su control.

Delfin Córcoles dijo...

Buen fin de semana amigo Caminante. Que continúe la mejoría.

Jesús García dijo...

Se trata de mentirle a todo el mundo, de ceder ante quien sea, y simultáneamente aparecer como com paladín de la verdad y como alguien capaz de conciliar los intereses de unos y de otros, algo que se ha demostrado falso.
Un saludo