lunes, 9 de marzo de 2009

Elogio de la basura...


Hoy no he podido entrar al Bar a la hora habitual por distintas circunstancias que no vienen al caso, pero sí he podido "empaparme" de noticias, tanto por radio, periódico como por televisión.
No suelo ver televisión. No me seduce en los últimos años. Salvo los informativos no solía ver nada de la programación, y desde ahora, menos aun.
Estaba atendiendo unas gestiones en casa de mi hija y de su novio y en la espera he enchufado Antena 3, "Espejo Público", el programa que conduce Susanna Griso.
He de reconocer que esta periodista es atractiva fisícamente, agradable y da bien en televisión. No altera la voz, conduce amablemente su espacio y tiene cierta finura que otras compañeras adolecen.
Hasta aquí todo bien.
Después de una tertulia de periodistas a mi entender bastante heterogénea que ha discutido sobre si Rodríguez estaba quemado o no; si se agotará la legislatura, si habrá remodelación de ministerios, si "los ángeles tienen sexo o cuantos caben en un alfiler"(ironía), han llegado al espacio estrella, donde Cristina Almeida y el Jefe de Servicio de Ginecología del Severo Ochoa se han despachado a gusto sobre el aborto y la futura ley.
Por supuesto no había nadie que defendiese la postura de la vida. Y el monólogo entre dos, asistidos por Susanna que tibiamente metía alguna pregunta, ha llegado a tal extremo que hasta Cristina Almeida ha puntualizado que ella "no estaba a favor del aborto" sino a favor de la despenalización del aborto.
El médico insistía que "cada 6 partos hay un aborto, lo cual es una tasa razonable". Es decir, 600.000 partos y 100.000 abortos. ¡Una maravilla!.
Esto, más un desgobierno empecinado en abrir un camino al sexo más libre aún sin ninguna consecuencia en la infancia y juventud ya cansa.
Cansa hablar y escribir casi a diario sobre los mismos temas porque es como darse golpes contra una pared.
El psoe y sus socios y algunos que no son socios se han embarcado en una carrera hacia la muerte, a una elevación de la muerte en lugar de la vida, y a eso le llaman progreso.
Puedes abortar niña... Practica todo el sexo que quieras, no te preocupes. Es tan sólo una experiencia.
Aquí estamos nosotros para quitarte el problema...
Y habrá diputados que voten a favor... Es duro y triste.
Frente a tanto elogio de la basura nos puede dar el deseo de taparnos las narices y abandonar. Pero no ha de ser así.
Merece la pena, si acaso más aún, seguir alzando la voz en favor de todo aquello que significa valor, dignidad, honradez, amor, cariño, lazos de unión.
Ahora más que nunca, la basura hay que retirarla.
Buen día, amigos.

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