Un país en la mochila...

Ayer por la tarde anduve poco por el Bar. Tenía viaje previsto. Ignacio, mi hijo, había sido seleccionado como finalista en un certamen organizado por la asociación de cine "Florián Rey" de la Almunia y me pidió si podía llevarle a esta población.
Dista unos 50 kms. de Zaragoza y se llega fácilmente por la carretera autovía de Zaragoza a Madrid.
La población conjuga ese sabor popular no perdido con la modernidad creciente. Aún domina el carácter agrícola de la población aunque se augura un futuro industrial floreciente.
La población ha experimentado un crecimiento notable(sobrepasa los 10.000 habitantes)con el asentamiento de emigración especialmente árabe, del este de Europa y algo menor sudamericana.
Tiene una pujante actividad estudiantil con su Escuela Universitaria Politécnica.
Pués dicho y hecho. Nos plantamos en las puertas del cine esperando la llegada de los miembros de la Asociación Florián Rey.
Fuimos de acompañantes, en plan "pantojos" totales, Encarna, la "tata" de Ignacio y yo mismo,como padre,conductor,representante del "artista" y todo en una sola persona.
Mientras esperábamos pude darme cuenta de la cantidad de establecimientos regentados por la población emigrante: carnicerías árabes, locutorios, bares...
Se escuchaba a niños pequeños hablar en ruso(¿?), español, jugar a la pelota todos juntos. A las madres entrar en las tiendas ataviadas de formas diferentes...
Es algo interesante cuando eso se vive en una sociedad que se preocupa solamente del trabajo diario y de vivir lo más dignamente.
¿Y el certamen de cine?. ¡Ah, sí, se me "olvidaba"!. ¡Mi hijo había confundido el día 16 de marzo, última fecha de entrega de guiones con la del 16 de mayo, entrega de premios!.
Las frases de agradecimiento del probable premio se quedaron en el cajón.
¡El oscar tendrá que esperar, que se le va a hacer!.
Un abrazo,amigos.